martes, 26 de agosto de 2014

Albert Einstein.

(1879/03/14 - 1955/04/18)

Coeficiente Intelectual: 160 


Físico alemán 

Nació el 14 de marzo de 1879 en Ulm. 

Su padres se mudaron a Munich cuando Einstein era un infante. El negocio familiar, una fábrica de aparatos eléctricos, quebró en 1894, entonces la familia se traslada a Milán, Italia. 

Una brújula despertó el interés de Albert Einstein por la ciencia cuando a los 5 años se encontraba enfermo en la cama. Su padre se la regaló y quedó fascinado porque su aguja siempre apuntaba al mismo lugar, lo que le dio a entender que había fuerzas que impulsaban a todas las cosas. Sin haber completado la escuela secundaria, falló un examen que lo habría hecho recibir un diploma de ingeniero eléctrico en el Politécnico de Zurich. Volvió en 1896 al Politécnico y se graduó en 1900 como maestro escolar de secundaria en matemáticas y física. 

Durante dos años se dedicó a la enseñanza sustituyendo a profesores o dando clases particulares. Finalmente, en 1902 consiguió trabajar como examinador en la Oficina Suiza de Patentes en Berna. En el año 1905 se doctoró por la Universidad de Zurich presentando una tesis sobre las dimensiones de las moléculas; además escribió tres artículos teóricos de gran valor para el desarrollo de la física del siglo XX. Su tercera publicación fue Sobre la electrodinámica de los cuerpos en movimiento (1905), en la que exponía la teoría especial de la relatividad. La hipótesis que sostenía que las leyes mecánicas eran fundamentales fue llamada visión mecánica del mundo. En cambio, La hipótesis que mantenía que eran las leyes eléctricas las fundamentales recibió el nombre de visión electromagnética del mundo. Ninguna de estas dos concepciones eran capaces de dar una explicación a la interacción de la radiación y la materia al ser. En 1905 llegó a la conclusión de que la solución no estaba en la teoría de la materia sino en la teoría de las medidas. Tras este razonamiento, comenzó desarrollar una teoría que se basaba en dos premisas: el principio de la relatividad y el principio de la invariabilidad de la velocidad de la luz. 




Tras esto fue capaz de explicar los fenómenos físicos observados en sistemas de inercia de referencia distintos, sin tener que entrar en la naturaleza de la materia o de la radiación y su interacción. A pesar de los numerosos científicos en contra de sus teorías, eran reconocidos importantes seguidores. Como su primer defensor conocido hay que citar al físico alemán Max Planck. Asistió durante cuatro años a la oficina de patentes mientras comenzaba a destacar en la comunidad científica y ascendiendo en el mundo académico de la lengua alemana. Primero fue a la Universidad de Zurich en 1909; tras dos años allí se marchó a la Universidad de Praga, de lengua alemana, y en 1912 regresó al Instituto Politécnico Nacional de Zurich. Por último, en 1913 fue nombrado director del Instituto de Física Kaiser Guillermo en Berlín. 




En 1907, inicia su trabajo en la extensión y generalización de la teoría de la relatividad a todo sistema de coordenadas. Comenzó con el enunciado del principio de equivalencia según el cual los campos gravitacionales son equivalentes a las aceleraciones del sistema de referencia. Fue publicada en 1916. Apoyándose en esta teoría general de la relatividad, comprendió las variaciones del movimiento de rotación de los planetas y predijo la inclinación de la luz de las estrellas al aproximarse a cuerpos como el Sol. A partir del año 1919, comenzó a ser reconocido internacionalmente consiguiendo premios de varias sociedades científicas, como el Premio Nobel de Física en 1921. 




Durante la I Guerra Mundial, condenó públicamente la participación de Alemania en ésta. Al finalizar la guerra continuó con sus actividades pacifistas y sionistas, lo que provocó numerosos ataques por parte de grupos antisionistas y de derechas alemanes. En 1933 partió hacia Estados Unidos. Allí obtuvo trabajo en el Instituto de Estudios Superiores en Princeton, Nueva Jersey. Continuó con sus actividades en favor del sionismo pero decidió abandonar su postura pacifista anterior debido a que pensaba que el régimen nazi de Alemania era una amenaza para la humanidad. En 1939 con otros físicos enviaron una carta al presidente Franklin D. Roosevelt pidiéndole que fuese creado un programa de investigación sobre las reacciones en cadena. Esta carta logró acelerar la fabricación de la bomba atómica. En 1945, cuando ya se sabía de la existencia de la bomba, Einstein volvió a escribir al presidente para convencerle de que no utilizase el arma nuclear. 




Tras la guerra, Einstein se convirtió en activista del desarme internacional y del gobierno mundial, y siguió contribuyendo a la causa del sionismo. A finales de la década de 1940 y principios de la de 1950, defendió en Estados Unidos la idea de mantener la libertad política. 




Albert Einstein falleció el 18 de abril de 1955 en Princeton. Las últimas palabras que dijo antes de morir fueron en alemán y no fueron comprendidas por la enfermera que estaba a su lado, ya que no entendía el idioma. 




Premios destacados

Premio Nobel de Física (1921)

Medalla Copley (1925)

Medalla Max Planck (1929)





Einstein tuvo distintas nacionalidades:



Alemana (1879-96)

Apátrida (1896-1901)

Suiza (1901-55)

Austríaca (1911-12)

Alemana (1914-19)

Alemana (1919-33)

Estadounidense (1940-55)


El Cerebro de Einstein.







Una investigación publicada en la revista científica Brain: a journal of Neurology, concluye que los lóbulos parietales (zona encargada de recibir ciertas sensaciones) del ganador del Nobel de Física, Albert Einstein, tienen un patrón insólito de surcos y crestas que está relacionado con su capacidad extraordinaria para resolver y conceptualizar inventos y problemas.Tras su muerte en 1955, a los 76 años, de un aneurisma de aorta, el cerebro de Albert Einstein fue sustraído y fotografiado desde distintos ángulos; se dividió en 240 bloques y miles de secciones histológicas -rodaja fina de un tejido- se prepararon a modo de muestra para su estudio. La corteza cerebral es una capa delgada de materia gris que cubre la superficie de los hemisferios cerebrales e incluye la corteza motora, sensorial y partes vinculadas con la visión, el habla y la audición.

“En esta investigación particularmente se describe la neuroanatomía externa de esta parte del cerebro de Einstein a partir de 14 fotografías descubiertas recientemente y tomadas desde distintos ángulos, ángulos poco convencionales”, asegura vía correo electrónico Dean Falk, antropóloga de la Universidad de Florida y autora del estudio. Estas imágenes han revelado la formación prematura del afamado científico e inventor como violinista; su habilidad para imaginar acontecimientos y ser capaz de prever sus consecuencias, así como su capacidad para el procesamiento visoespacial, según concluye el informe. “Encontrar estas características es difícil, ya que no son obvias. Se deducen por la existencia de pliegues adicionales, bultos poco comunes u otras peculiaridades de la corteza cerebral”, prosigue el documento.

El cerebro de Einstein no tenía un tamaño excepcional y su peso era convencional. “Pero queríamos investigar algo que evidenciará el genio que había dentro”, continúa la investigadora en las conclusiones del estudio. “A diferencia de lo que habían concluido investigaciones anteriores, estas fotografías han revelado que el cerebro de Einstein no tenía forma esférica. El lóbulo parietal inferior izquierdo es más grande que el derecho, mientras que el lóbulo parietal superior aparece más marcado en el hemisferio derecho de su cerebro. Además, sugieren que tanto la corteza somatosensorial primaria como la motora encargada de la cara y la lengua están más desarrolladas en el hemisferio izquierdo”, continúa el equipo de investigadores.

Por el contrario, los hallazgos sí concuerdan con los resultados de un estudio de Witelson en 1999: los lóbulos parietales del cerebro de Einstein le dieron al científico unas habilidades extraordinarias. Algo que no sorprendió a Falk y a su equipo. “En esta área es donde se fundamentan los procesos de razonamiento y juicio. Los pliegues en esta parte de la corteza cerebral de Einstein son muy densos, lo que es una evidencia del talento único del científico para cerrar los ojos y visualizar objetos y resolver problemas”, agregan los autores en las conclusiones.

“El haber tenido la posibilidad de estudiar el cerebro de Einstein de una forma más profunda y detallada puede permitir a otros investigadores comparar los resultados con los de otros afamados científicos y así conseguir trazar la anatomía cerebral de los genios”, concluye el estudio. Algunos de estos cerebros están preservados desde hace décadas, como el de Carl Friedrich Gauss, físico alemán considerado por muchos “el príncipe de las matemáticas”, y el del fisiólogo ruso Ivan Pavlov, padre de la psicología conductista.

La investigación sobre el cerebro de Einstein comenzó en 1955, poco después de su fallecimiento en Princeton, Nueva Jersey. Fue entonces cuando los herederos de Einstein, entre ellos su hijo, Hans Albert, aprobaron el estudio de su cerebro. El patólogoThomas Harvey fotografió y seccionó el cerebro del científico. Preparó después 2.000 muestras que distribuyó entre, al menos, 18 investigadores. Tras la muerte de estos, muchas de ellas se perdieron.

Unas 160 de aquellas muestras están en la Universidad de Princeton, y una cantidad adicional de 560 diapositivas se guardan bajo llave en el Museo Nacional de Salud y Medicina en Maryland. Aunque el paradero de otras muchas imágenes del cerebro del genio es desconocido, se han encontrado algunas en Ontario (Canadá), California, Alabama, Hawaii, Filadelfia, Japón y Argentina, según informa el diario Los Angeles Times.


Con una masa de 1.230 gramos, el cerebro de Albert Einstein no era mayor que el de un hombre adulto normal, pero estaba estructurado de un modo diferente que lo hacía singular, según el análisis de 14 fotografías tomadas tras su muerte.

El estudio del cerebro de Einstein se inició tras su muerte en 1955, cuando el patólogo Thomas Harvey lo fotografió desde distintos ángulos antes de cortarlo en 240 trozos para poder analizarlo. Estos trozos fueron cortados a su vez en láminas lo bastante finas como para poder ser examinadas con un microscopio.

En los años sucesivos, Harvey distribuyó muestras del cerebro de Einstein a casi una veintena de investigadores internacionales para facilitar su estudio. Sin embargo, hasta ahora solo seis investigaciones han sido publicadas.

Uno de esos estudios, dirigido por la antropóloga Dean Falk, de la Universidad del Estado de Florida (EE.UU.) y publicado recientemente en la revista ‘Brain’, desvela ahora que el córtex prefrontal, situado sobre los ojos en la parte anterior del cerebro y que alberga aptitudes como la capacidad de concentración, la planificación o la perseverancia ante los retos, estaba excepcionalmente desarrollado en el cerebro del científico alemán.

“El cerebro de Einstein tenía un córtex prefrontal extraordinario, lo que pudo contribuir a sus excepcionales capacidades cognitivas”, señaló Falk.

Asimismo, Einstein tenía una densidad anormalmente alta de neuronas en algunas regiones del cerebro y una densidad mayor de células gliales (cuya función principal es dar soporte a las neuronas) que otras personas.

Además, los investigadores descubrieron anomalías en los lóbulos parietales de Einstein. Estos lóbulos intervienen en el pensamiento simbólico, las aptitudes lingüísticas, el razonamiento matemático y la orientación espacial. “Tal vez aportaron algunas de las bases neurológicas para las aptitudes visuoespaciales y matemáticas de Einstein”, señala la publicación.

Tras la muerte de Harvey, sus herederos donaron en el año 2010 el material que quedaba de Einstein al Museo Nacional de Salud y Medicina que el Ejército de EE.UU. tiene en Maryland. Entre ese material se encontraban las catorce fotografías del cerebro de Einstein tomadas desde distintos ángulos y que hasta ahora no habían sido publicadas.





Curiosidades Sobre Albert Einstein.



Taciturno. El pequeño Einstein no dio señales tempranas de genio. De hecho, fue lento para aprender a hablar, tenía un comportamiento taciturno de niño y, en lugar de jugar con sus compañeros, tendía a caminar pensativo y a soñar despierto.



La brújula. Uno de los primeros momentos de asombro de su vida fue descubrir una brújula magnética de su padre cuando tenía cuatro o cinco años. Observar cómo la aguja señalaba siempre en la misma dirección lo dejó fascinado.



Demócrata. El ideal científico de Einstein era la democracia, que en su libro “Mis ideas y opiniones” definía como “Que se respecte a cada hombre como individuo y que no se convierta a ninguno de ellos en ídolo”. En cuanto al dinero, consideraba que “solo apela al egoísmo e invita irresistiblemente al abuso”.



El frigorífico de Einstein. Además de físico teórico, Einstein fue inventor. Una de sus creaciones más interesantes fue un tipo de refrigerador, que decidió fabricar después de escuchar que una familia que vivía en Berlín había muerto al romperse el precinto del refrigerador de la casa y desprender todos sus gases tóxicos. Einstein quería que el nuevo no tuviera partes que pudieran romperse, que fuera más seguro, eliminando la bomba usada para comprimir el refrigerante. Y creó la bomba Einstein-Szilard basada en electromagnetismo. Además era silenciosos y a prueba de emisiones.



Violinista. Einstein era aficionado a dos cosas: la navegación en vela y la música. Tocaba el violín, y parece que la conexión entre este instrumento y la ciencia la conoció gracias a Pitágoras, uno de los primeros científicos que estudió la acústica, y que además creó cuerdas tensas con puentes deslizables, fundamento del actual violín.





La última misiva. La última carta que escribió Einstein, con fecha del 11 de abril de 1955, estaba dirigida al filósofo y matemático Bertrand Russell para aceptar la forma final del documento posteriormente conocido como el “Manifiesto Russell-Einstein”, en que se llamaba a una conferencia para estudiar los peligros de la carrera armamentista y advertían que existía “un peligro muy real de exterminación de la raza humana por el polvo y la lluvia de las nubes radioactivas” y que la única “esperanza para la humanidad es evitar la guerra”.


Bibliografia:

http://www.biografiasyvidas.com/monografia/einstein/

http://www.cubadebate.cu/etiqueta/albert-einstein/








IMAGENES SOBRE DEFICIENCIA MENTAL.









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